La fábrica y las oficinas de Coca Cola en la ciudad, la Sociedad Deportiva Hípica, la facultad de las Ciencias de la Educación y la reforma de la sede actual de la Real Academia Galega llevan la firma de Andrés Fernández-Albalat Lois (A Coruña, 23 de junio de 1924), venerado maestro de arquitectos al que la delegación coruñesa del colegio oficial de Galicia dedica a partir de hoy una exposición de un mes en su local de la calle Federico Tapia.

Planos originales, dibujos, fotografías y documentos del archivo del arquitecto componen esta muestra, focalizada en tres obras de su etapa mediana cuya construcción comenzó a finales de los años sesenta del siglo pasado: la fábrica de Sargadelos en Cervo (Lugo), 50 viviendas subvencionadas en Fontán, en Sada, y el núcleo parroquial de San Fernando en Santiago.

"Son tres obras sencillas y en general baratas, diseñadas principalmente para cumplir servicios. Porque la arquitectura es un trabajo para el prójimo, no para el arquitecto", resume Albalat. La exposición en la sede coruñesa del COAG refleja esa orientación altruista de la construcción y la arquitectura desplegada en los campos industrial, inmobiliario y social.

La fábrica de Sargadelos es un singular proyecto que Isaac Díaz Pardo encargó en 1967 a Albalat en una finca en Cervo. El edificio principal tiene forma circular con corona, soportales, galerías y cristaleras. "Desarrollamos un planteamiento urbano dentro de un bosque", comenta el autor sobre su obra. En sus años de más actividad industrial y cultural acogió reuniones, congresos nacionales e internacionales y celebraciones.

El conjunto de medio centenar de viviendas subvencionadas de Sada es un proyecto "de humanización sencillo, adaptado a un terreno en pendiente". Las casas, de tres habitaciones en 76 metros cuadrados, miraban al mar cuando empezaron a ocuparse, en 1968 -hoy otros bloques residenciales impiden esa vista-, tienen todas porche y jardín interior. "Salieron baratas, comprar una de estas viviendas costaba entonces 270.000 pesetas", hace memoria el arquitecto.

Durante más tiempo, entre 1968 y 1983, Albalat llevó a cabo distintos trabajos en el núcleo parroquial de San Fernando, en la zona nueva de Santiago, en un terreno en desnivel donde sucesivamente se pusieron en pie una iglesia comunitaria, viviendas sacerdotales, una guardería y un mirador sobre la calle. En el espacio hay cuatro lienzos del pintor, escultor y arquitecto Joaquín Vaquero Turcios. "Los párrocos quedaron muy contentos con la obra, que fue algo más complicada", recuerda Fernández-Albalat.

Más de cuatro décadas después de que se pusieran las primeras piedras de estas obras, hoy las rescatan los arquitectos coruñeses para admirar el trabajo de su maestro. "Son proyectos que animan a hablar de arquitectura y sin pasión no hay arquitectura, que yo la entiendo como el trabajo de llegar a la culminación de un proyecto de formas físicas a partir de ideas", reconoce Albalat, que a sus 90 años mira atrás con nostalgia: "Las obras se hacen, se terminan, se usan y se emancipan, como los hijos".

Andrés Fernández-Albalat fue profesor emérito de la Universidade da Coruña; decano del Colegio de Arquitectos de León, Asturias y Galicia; académico de número de la Real Academia Gallega y la Real Academia de Doctores. Participó en las casas acristaladas de la Mariña, en la remodelación del santuario de Pastoriza, la Casa-Museo de Rosalía y el estadio Multiusos de San Lázaro, entre otras. En el terreno del urbanismo diseñó la Ciudad de las Rías, un área urbana costera entre Ferrol y A Coruña.

La muestra del COAG en A Coruña se inaugura este miércoles 21 de enero a las 20.00 horas y se podrá ver en horario de 10.00 a 14.00 hasta el 20 de febrero.