"Este disco nace de la disyuntiva de cómo contarle la realidad a mi hija"

-Este nuevo disco es diferente a los demás, introduce otros ritmos, ¿cómo surge La llamada

-Es un disco diferente porque compuse las canciones de una manera diferente, por lo general el cantautor agarra la guitarra y parte de la armonía y de la melodía y, en esta ocasión, partí desde el ritmo. Acudí a la música tradicional latinoamericana para componer desde esos ritmos nuevas canciones. Y le imprimen un cierto carácter de celebración, inevitablemente, porque el ritmo tiene ese carácter comunitario que invita casi a la danza, aún cuando retrata una realidad difícil. Las canciones no pierden ese matiz reivindicativo pero sí que tienen esa vocación de cita, de convocatoria, de llamada, como dice el título. Llamada para buscar los vínculos necesarios para generar el espacio de encuentro que nos ayude a sentirnos más fuertes a la hora de cambiar la realidad que nos rodea. Yo creo que de eso hablan las canciones. La llamada hace referencia a las llamadas del Carnaval uruguayo. En Montevideo, la gente sale a la calle y, al golpe de los tambores, convocan a la gente a que se sumen a la comparsa, al pasacalle y a la celebración. Estas canciones tienen esa pretensión, de citar a la gente y de que sea capaz de deshacerse del miedo, de salir del inmovilismo y de ser capaz de asumir el protagonismo que nos corresponde.

-Las letras tienen también cierto aire de consigna de manifestación, con frases como "que el miedo cambie de bando" o "que nadie se olvide de tu alegría"...

-Sí, el single tiene una impronta muy marcada y, aunque suene vanidoso decirlo, tiene vocación de himno y por eso surgen consignas de esas características.

-Hay también una visita a las fábulas y a los cuentos populares, ¿le ha influido el hecho de haber sido padre a la hora de componer para contar la realidad de una manera un poco más agradable de lo que es?

-Sí, se trataba precisamente de eso, de rescatar la fábula, y yo creo que sí, que lo hice influido por mi reciente paternidad y ante la disyuntiva de cómo contarle a mi hija cómo es el mundo que nos toca vivir ahora. Las fábulas tratan de problemas eternos y universales y pueden servirnos para contarnos algunas historias que nos toca vivir en el día de hoy.

-Y así, desfilan por sus canciones unos ratones que se rebelan contra el flautista, un lobo feroz que quiere desahuciar por impago a una familia...

-Sí, las fábulas trasladan a los animales conductas, tendencias, vicios y virtudes humanas y nos ayudan a contar historias.

-Cambian los ritmos, las letras... ¿cambiará también el formato del concierto -antes hablaba con el público y le contaba, además de cantarle, algunas historias- o eso se mantiene?

-Eso va a estar porque forma parte de mi manera de entender la puesta en escena, aunque ahora va a ser diferente. No va a ser tan discursivo, hasta ahora hacía un relato de principio a fin del concierto, ahora vamos a hacer una apuesta audiovisual pero, inevitablemente, contaré historias porque me gusta mucho esa faceta de cuentacuentos que también tiene el trovador.

-Los sones vienen de Latinoamérica, pero las historias que cuenta tienen mucho de la realidad española, con las asambleas, los desahucios, los despidos y el Banco de Alimentos.

-La crisis aparece casi de manera permanente en este disco, hasta cuando le canto al amor hay referencias a la situación económica, pero, en el fondo, son problemas universales. La precariedad del trabajador que aparece en La llamada es un fenómeno que no solo se da en España, quizá aquí se da de una manera más grave, pero ocurre en todas partes, como Rebelión en Hamelin, es la necesidad de cuestionar el discurso oficial y hegemónico. Ese derecho a la disidencia es aplicable a todas partes. Hay una mirada local pero, a menudo, uno acaba hablando de problemas universales.

-Un disco con muchas similitudes con el discurso de Podemos.

-Las canciones fueron compuestas antes de la irrupción de Podemos. Podemos no es algo novedoso, es la consecuencia de algo, es fruto de las mareas, que vienen defendiendo los derechos y los servicios públicos. Nace del 15-M y del activismo de mucha gente que no se resigna y que quiere cambiar la realidad. Este disco tiene que ver con eso, con la tradición activista, inconformista y exigente, de las que revisan el pasado, pero que miran hacia el futuro.