Después de que la compañía Circo de los Horrores llevara al circo al terror de una cripta vampírica en su espectáculo homónimo, e introdujera a sus espectadores en el mundo de la locura con Manicomio, solo le faltaba sumergirse en los infiernos. Y así lo ha hecho su director de espectáculo, Suso Silva, Lucifer en la función de Cabaret Maldito y que, desde su primer pase ayer a las 20.30 horas hasta el domingo, lleva a los asistentes al Coliseum coruñés a un show de humor, circo, acrobacias, teatro, canciones, danza en vivo y "picante y perversión".

Al contrario que en las anteriores funciones de Circo de los Horrores, en esta función se ha vetado la entrada a menores de 18 años. En la treintena de artistas, que integran la obra, procedentes tanto de España como de Portugal, Bielorrusia, Ucrania, Italia o Alemania, se incluyen trajes sadomasoquistas, ángeles de alas negras y travestidos, y, de los siete pecados, el más visible es el de la lujuria. "Nuestro idioma está completamente desbocado, estamos asalvajados completamente, cuerpos desnudos, vicio, perversión" explica Suso Silva, sobrino del fundador de La Ciudad de los Muchachos y que combina unas "bases" circenses con el teatro.

Y también el humor, ya que, de las dos horas y media que dura la función "al final el 80% es cachondeo" y "el humor y la comedia priman sobre todo lo demás". Ya sea mediante los monólogos de Mefisto o de la interacción de Lucifer con el público, que pasea entre los asistentes "jugando a sacar sus pecados. La cuestión es provocar para que el público muestre reacciones", cuenta Silva.

La gira de esta obra, que empezó en marzo en Santander, es la más ambiciosa de Circo de los Horrores, e involucra a 80 trabajadores y 25 tráileres para transportar el material. También "cierra un ciclo", según Silva, que añade que habrá al menos una cuarta función pero que no quiere desvelar su contenido para no dar ideas a los imitadores, como los que, dice, ya le copiaron otras funciones. En A Coruña, las acrobacias irreverentes y los números musicales blasfemos entre catedrales góticas y pentágonos en llamas de Cabaret Maldito pueden verse hoy a las 22.00 horas, mañana a las 19.00 y 22.00 horas y el domingo a las 18.00 horas en el Coliseum.