Rubén Salvador, licenciado en trompeta clásica y de jazz, lleva tres años impartiendo clase de este instrumento en la Escuela Municipal de Música. Hoy actúa a las 22.30 horas en Garufa, con su grupo R.S. Atlantic Faktor, adelantando temas de su nuevo disco, Akúfeno, que ha sido grabado a medias entre Galicia y Euskadi con dos formaciones.

-¿Tocarán todos los temas de este nuevo disco?

-No. He grabado algunos temas compuestos por mí con la vertiente de aquí, Atlantic, y me queda grabar la otra parte con la vertiente vasca. En el concierto estaremos seis músicos que hemos participado en la grabación, y el guitarrista Rubén Barros como invitado.

-¿Por qué hacer un disco a medias entre allí y aquí?

-En A Coruña he estado coincidiendo mes a mes con los músicos con los que he grabado, haciendo tributos en el Jazz Filloa. Los temas del País Vasco los grabo con los músicos con los que grabé mi anterior disco, que recibió el premio especial del jurado al mejor disco de jazz del País Vasco del 2012 en los premios BBK Jazz.

-También toca el flügelhorn

-De las nueve composiciones que interpretaremos en el concierto tocaré unas cuatro con él, el resto con trompeta. El del flügelhorn es un sonido mucho más dulce, mucho más grande, más oscuro también. Se utiliza sobre todo en baladas, en la bossa nova, o en temas más lentos de lo habitual.

-¿Cuál es su estilo de jazz?

-Un poco de todo. Un jazz un poco contemporáneo, un jazz modal, un poco bossa nova también? Alternar entre trompeta y flügelhorn te permite adaptarte a los temas, cambiar de color.

-¿Se toca diferente el jazz en Galicia y en País Vasco?

-Aquí hay unos grandísimos músicos, todos con una formación muy importante. Pero tanto gallegos como vascos hemos estudiado y hemos bebido casi de las mismas fuentes.

-¿Trasplantadas desde los Estados Unidos?

-Exactamente, digamos que ha sido trasplantado el lugar y el sitio donde hacer la música, pero hemos bebido de las mismas fuentes. Sí que cada músico es diferente y tiene su bagaje e influencias, pero eso no es mejor ni peor, sino diferente. Para mí son igual de buenos, tanto los de aquí como los de allí.

-¿Y compuso igual para los vascos y los gallegos?

-Lo he hecho de manera diferente porque me gusta muchísimo componer en concreto para las personas con las que voy a grabar o tocar en directo.

-En el grupo hay una vocalista. ¿También ha hecho las letras?

-No, las ha hecho Xabier Romero, un alumno más amigo que alumno. Es un artista increíble, fotógrafo, poeta?

-¿Se hace difícil componer para seis miembros?

-Lo que más fácil me resulta es componer, porque conozco a la gente con la que voy a tocar, he coincidido con ellos durante estos tres años. Lo más difícil es darle vía al proyecto, entrar en circuitos de festivales de jazz, teatros y demás.

-¿Cuándo saldrá Akúfeno

-Ahora me voy de giras, intentaré que el disco esté en noviembre.

-¿Cómo se lleva la improvisación con un grupo con cinco instrumentos diferentes?

-Sin ningún problema. Los temas se presentan con una melodía y después hay compases de improvisación libre, pero de interacción con todos los músicos. Estamos habituados, llevamos haciéndolo muchísimo tiempo. La melodía se presenta como si hicieras un comentario, pero luego surge una conversación que puede ser totalmente diferente ahora, o en cinco minutos? Me fascina esa improvisación o conversación en tiempo real.