La dirección del colegio Calasanz, situado en Os Rosales, terminó ayer la campaña solidaria de Navidad, en la que recogió alimentos para las familias más necesitadas. Al lado del stand donde se depositaban las donaciones, un contador marcaba día a día los kilos entregados por los alumnos. El centro consiguió recaudar este año más de una tonelada. Los voluntarios comenzarán el empaquetado de los alimentos para entregarlos a las familias sin recursos con motivo de la celebración de las fiestas navideñas.