Hacen música muy grande bajo el nombre de un planeta muy pequeño y, como él, en cuanto a música para niños, se mueven en una órbita distinta. Los Plutones, el grupo formado por Félix Arias, Samuel Pérez y Alberto Villarroya, vuelven esta tarde a las 18.00 horas a la sala Mardi Gras para subir a escena su Historia del rock, un show infantil en el que, combinando música y relatos, descubrirán a los más pequeños de la casa los mejores clásicos del género desde los años cincuenta a los setenta.

"A veces aparece anunciado como School of rock, pero lo cierto es que no pretendemos aleccionar a nadie. Solo queremos que sea una opción cultural para los niños", aclara el líder de la formación, Félix Arias, señalando que las narraciones que compone son inventadas. "Son fábulas, nada real o con intención didáctica", dice.

Para crearlas, el cantante decide primero el repertorio. Escoge "temas que puedan resultar atractivos para los niños" y que el grupo pueda defender, a partir de los que articula el resto de la historia. Además de de las canciones, la que contarán esta tarde surge de algo tan sencillo como el nombre de dos calles cercanas al Mardi Gras. San Juan y San Roque bautizan a los protagonistas del relato de Los Plutones, que narrarán cómo dos jóvenes con aspiraciones musicales terminan tocando en un concierto multitudinario. "A medida que la historia se va desarrollando, vamos jugando con los nombres. Por ejemplo, Juan dice 'No me llames Juan, llámame Jonnhy', y entonces tocamos Jonnhy B. Goode", explica Arias, que junto a Chuck Berry menciona a Neil Diamond y Los Beatles.

Precisamente para estos últimos, Los Plutones tienen también un espectáculo propio. Sin embargo, dicen, desmerece en comparación con Historia del rock. "Creo que este es más divertido, aunque lo bueno de Los Beatles es que los temas son famosísimos y a los niños les suenan. Sobre todo Yellow Submarine, es su preferido", comenta el artista.

Con sus notas tan reconocidas cierran el espectáculo, invitando a los pequeños al escenario como número final. Se trata de una costumbre de los componentes del grupo, cuya búsqueda de interacción con el público infantil les ha dejado más de una anécdota. "A veces me han desenchufado el monitor o un pedal", cuenta el músico, que recuerda luego cómo una niña mencionaba a Los Ramones ante su pregunta de quién era el grupo más famoso del mundo. "Tendría unos 4 años, y llevaba una camiseta de la banda", rememora.

Y es que en ocasiones los niños vienen aprendidos de casa, pero en general el de Los Plutones es su primer contacto con el rock. Lo descubren emocionados, "como solo un niño lo hace", impactados por la nueva situación en la que se encuentran, y que no solo ellos disfrutan. Como los temas interpretados son los originales, los padres también se divierten, e incluso acuden más que los propios niños. "Me gustaría ver a más peques que adultos. A veces entran tres acompañando a un niño, como si estuviera dirigido a ellos", cuenta entre risas.

Según Arias, el rescate de clásicos del rock funciona bien, pero eso no significa que descarte cambiar de estilo en el futuro: "Tengo en la cabeza hacer la historia del country o de la samba", dice, añadiendo que la composición de temas propios para el show también "está en el aire". "Hay que ver cómo se hace, porque es competir con los clásicos del rock", advierte.

Escojan el camino que escojan, Arias está convencido de que los niños serán capaz de apreciarlo. En su opinión, encajonarlos siempre en la música infantil implica limitarlos, así como infravalorar su habilidad para responder a diferentes géneros. "No creo en la música hecha para niños. Ellos tienen la capacidad de escuchar cualquier cosa, pero antes tienen que tener la oportunidad de hacerlo", sentencia.