Distintos estilos, espacios e incluso momentos históricos, pero siempre la misma ciudad. La Galería Artbys, que se estrenaba hace apenas cuatro meses con una exposición de artistas gallegos y obras de Picasso, apuesta en su muestra más reciente por la urbe en la que reside, A Coruña, con una exhibición pictórica de sus rincones más famosos. A través de más de una treintena de cuadros y hasta el jueves 6 de septiembre, el local de la calle San Andrés mantendrá a la venta bajo el título de A Coruña. Unha Ollada la visión que creadores como Óscar Cabana, Miguel Zelada y Peña Romay tienen de la localidad, que ha sido retratada en un periodo comprendido entre 1900 y 2017.

La escena de la Marina realizada por Alfonso Abelenda y los paisajes portuarios en blanco y negro de Óscar Cabana son, según el encargado de la galería, Camilo Chas, los cuadros que han cosechado hasta el momento un mayor triunfo entre el público, que también ha encontrado un hueco en su punto de mira para los colores vivos de la artista Ánxela Meilán. Desde la inauguración de la muestra la semana pasada, tres visitantes han llegado a enzarzarse en una lucha de pujas por una de sus obras, cuya venta se suma a la de las otras cuatro piezas que la galería ha traspasado hasta la fecha.

"El mercado está bastante animado, todos quieren una imagen de A Coruña", asegura Chas, que cifra en 36 las obras restantes. Los cuadros, que van del pequeño al gran formato, plasman en su mayoría los puntos más reconocibles de la ciudad, como la zona del centro y de la dársena. La Torre de Hércules es otra de las grandes representadas, erigiéndose como uno de los elementos más repetidos en las pinturas de la exposición. "Es lo que más le gusta a la gente", dice el encargado de Artbys, señalando como ejemplo un acrílico de Alejos en el que el faro romano se yergue desdibujado tras una vegetación de verdes y morados imposibles. A lo largo de las paredes del local, el monumento aparece salpicado en pintura y lienzo de forma continua, llegando a merecer, como en el caso de una de las piezas de Cabana, el círculo rojo con el que el artista marca los focos de atención en sus obras. "Habrá que pintar más Torres", bromeaba en la galería Peña Romay, ya cargado con nuevos cuadros para la muestra.

La obra del lucense fue la primera que se vendió en la exhibición. Además del antiguo faro, la exposición ofrece otras vistas de la ciudad como el hotel Finisterre recreado por Xoan Guerreiro bajo un cielo que anuncia tormenta, Las Esclavas de Salvador Gutiérrez de la Concha, la Plaza de María Pita de Susana de Artaza y la calle Riego de Agua de Pedro Bueno. La mayoría de las escenas han sido buscadas por los artistas, pero otras han ido directamente al encuentro del pincel. Es el caso de la pieza Desde mi ventana, una composición en la que Marta Pardo comparte con los visitantes de la galería las vistas que ofrece una de las cristaleras de su vivienda.

Durante la inauguración del día 10, cuatro de las piezas, dos pinturas de Cabana y Víctor Rodríguez, y dos grabados de Laxeiro y Luis Seoane, fueron subastadas. La cantidad recaudada fue de 350 euros, algo menos de los 800 que la galería obtuvo con la puja de su primera exhibición y que, al igual que esta, entregaron a la Cocina Económica. "Lo vamos a convertir en una tradición, ya hay un compromiso entre ambas partes", explica Chas, que a partir de la próxima muestra incrementará en diez los días de subasta para aumentar los beneficios de la institución social.

Todavía queda tiempo para que A Coruña. Unha Ollada abandone el local, pero Artbys ya está preparando la siguiente exposición. Versará sobre las marinas gallegas, y tendrá un carácter más general que la exhibición actual pero, como en ella, la ciudad también estará presente. La dedicación a la urbe es una característica altamente valorada por el público que, asegura el encargado del edificio, busca tener una conexión con la obra. "La gente quiere su ciudad, ver la calle donde nació. Aquello que signifique algo para ellos", afirma.