La investigación científica desarrollada por las universidades españolas es la protagonista de la última exposición del Museo Nacional de Ciencia y Tecnología (Muncyt), que reúne en sus instalaciones ocho de los proyectos más destacados del panorama actual bajo el título de Campus vivo, investigar en la universidad. Hasta finales de junio del próximo año, la entidad tratará de poner en relevancia el papel que estas instituciones tienen en el avance del conocimiento del ser humano, que encuentra en la paleontología, las nuevas tecnologías y el medio marino las claves de sus investigaciones más punteras.

Los proyectos exhibidos en el museo se dividen en cuatro temáticas. El origen de la humanidad, los avances científicos y tecnológicos, y los retos sociales y del futuro engloban el trabajo de las siete universidades que representan la investigación en España, y que participaron en una convocatoria del Muncyt para poder compartir sus estudios en curso con los ciudadanos. De entre los más de 200 proyectos que se presentaron, la entidad escogió, según su coordinadora Ana María Correas, "los más representativos", teniendo también en cuenta que versaran tanto sobre el pasado, como sobre el presente y la posibilidad de realizar predicciones de cara a los años venideros.

El Sidrón, la cueva asturiana que cuenta con un yacimiento prehistórico, es uno de los proyectos del primer grupo. En ella llevan varios años trabajando los investigadores de la Universidad de Oviedo, desde que, en 1994, se descubrieran dentro restos fósiles de neandertales. "Es una línea de investigación importante, nos permite conocer nuestro pasado", indica Correas, que destaca además el abordaje desde la genética que están haciendo los ovetenses. La excavación ha permitido recuperar de estos Homo neanderthalensis muestras de ADN que, cuenta la coordinadora, podrían llegar a tener aplicaciones interesantes. "Podría reconstruirse su mapa genético. Nosotros portamos secuencias genéticas similares, pero, ¿y las que no tenemos? Si pudiéramos ponerlas en nuestro organismo, ¿mejoraríamos con la genética del pasado?", se pregunta.

También relacionado con el cuerpo y la salud está el estudio de la Universidad de Vic, la aplicación para móviles Walk@Work. Correas la destaca por su trabajo ante un problema cada vez más extendido, el sedentarismo, y porque responde a una de las mayores preocupaciones de las personas, la salud. "Es una app que puede descargarse el público y que mide el tiempo que el usuario permanece sentado, avisándole de cuándo tiene que levantarse y moverse", explica la coordinadora, destacando que puede evitar daños en el sistema circulatorio.

Biomateriales, aprendiendo de la naturaleza es el tercer proyecto que subraya. Se trata de un trabajo de la única universidad gallega de la exposición, la de Vigo, centrada en "el desarrollo de biomateriales a través de la extracción de fosfato cálcico" de dientes de tiburón, a día de hoy normalmente desechados durante su despiece. "Se está aplicando para hacer exoesqueletos. El objetivo es evitar en la medida de lo posible el rechazo en los trasplantes", dice de una línea de estudio especialmente importante por el envejecimiento de la población.

Desde la universidad, se esperan "amplias aplicaciones en cirugía maxilofacial, ortopédica, traumatología y medicina regenerativa" a partir de esta práctica apoyada en el medio marino, un área en la que se sustenta El ciclo del agua. La universidad cántabra, responsable del estudio, la analiza como fuente para desarrollos tecnológicos, cuya accesibilidad para personas con discapacidad trabaja la Universidad Politécnica de Madrid en el ámbito de la televisión y cuyas consecuencias de uso analiza la Universidad de Castilla La Mancha en su investigación.

La importancia de la estadística y la evolución del cosmos son otros proyectos en la exposición. La muestra puede visitarse de martes a viernes de 10.00 a 17.00 horas, de 11.00 a 19.00 los sábados y hasta las 15.00 los domingos.