La magia de todas partes del mundo se reúne esta tarde en la Galicia Magic FestGalicia Magic Fest, que celebra su segunda edición en el teatro Colón tras el éxito que supuso su estreno a finales del 2016. A lo largo de dos pases, a las 18.30 y a las 21.00 horas, cuatro magos de distintas nacionalidades subirán a escena para compartir con el público coruñés sus números de ilusionismo, orquestados por su director y maestro de ceremonias, Pedro Volta.

El mago pontevedrés será el encargo de presentar el show. Su función en la ciudad marcará el colofón final de una gira que ha pasado por teatros gallegos como los de Vigo y Vilagarcía, y que terminará en A Coruña su recorrido con un espectáculo lleno de ritmo, magia, y efectos audiovisuales. "Es una gala espectacular, en la que confluyen los diferentes estilos de artistas de primer nivel", afirma Volta, que destaca entre los participantes al dúo Kibalyon y a Henry Evans.

Los rusos y el argentino serán los platos fuertes de la gala, que no repite en magos, pero sí en diversidad. Al igual que en la primera edición, los prestidigitadores presentarán sobre las tablas distintos tipos de ilusionismo, sobre los que brillarán los cambios ultrarrápidos de vestuario realizados por Inna Rudova y Guillermo Neumaye. "Los cambios de ropa llaman mucho la atención, porque es difícil verlos en directo. Ellos hacen 15 o 20 en muy poco tiempo, es increíble", cuenta el presentador, que señala el número como uno de los preferidos del público.

La pareja de ilusionistas "ha recorrido festivales de todo el mundo", llegando hasta programas televisivos como el popular Got talent y Le plus cabaret du monde en París. Un prestigio similar lo ha obtenido Evans, cuya función le ha convertido en otro de los favoritos de la Galicia Magic Fest. "Es uno de los mejores magos del mundo. Hará un número que se proyectará en una pantalla de 8 metros, para que los espectadores lo puedan ver de cerca", comenta Volta sobre el ilusionista, galardonado con premios como el MVP, en 2002, o el Primer Premio de Cartomagia del Campeonato Mundial de Magia FISM celebrado en el 2000.

Compartiendo escenario con ellos, estará el "espectáculo poético" de "una leyenda de la magia", la estadounidense Tina Lenert, así como el español Arkadio. El representante nacional, premiado con el Madrake d'Or -el equivalente a los Óscar en el mundo de la magia- cerrará el ciclo de actuaciones con su último show, compuesto por grandes ilusiones. "El objetivo es que la gala se convierta en una marca que esté cada año presente. La magia tiene que estar en los teatros", dice el ilusionista, que actuará entre los artistas para mantener el ritmo del espectáculo. "Atravesaré una placa de acero con mi cuerpo e interactuaré con el público haciendo distintas predicciones", explica.

El ilusionista hace un balance positivo de la segunda edición de la gala, cuyas entradas en la ciudad "están volando". Las fechas navideñas, que "se prestan más a la magia" son uno de los motivos de su éxito, pero también la evolución que, según Volta, implica el espectáculo de este año con respecto al anterior. "El crecimiento está en la producción. No es que los artistas sean mejores, pero la conjunción de sus estilos hace que el plato sí lo sea", cuenta el mago, que asegura que la iluminación y la introducción de las proyecciones audiovisuales marcarán la diferencia.

En la tercera edición de la Galicia Magic Fest, el pontevedrés tratará de superarse. A pocas horas de finalizar el de este, Volta ya está planeando el espectáculo del próximo año, en el que espera ampliar las paradas de su gira y lograr, como hasta ahora, que sus participantes consigan sorprender. "Cada mago le va aportar algo muy especial al espectador", dice el ilusionista, que pone la mirada en todas las generaciones a la hora de idear el show. "Es para todos los públicos, pero el adulto también se sorprende. Lo que pretende la gala es que salga de un gran espectáculo de magia, no solo que vaya a llevar al niño", comenta.

Para encandilar tanto a pequeños como a mayores, cuenta el mago, el mejor momento es ahora. Volta asegura que el ilusionismo se encuentra en auge tanto a nivel técnico como de público, un excelente estado de salud del que no gozaba desde el pasado siglo XX. "Estamos en la segunda época dorada de la magia. Nunca antes el ilusionismo logró llenar tantos teatros como ahora. Estamos batiendo récords en todo el mundo, y estoy muy contento de poder formar parte de ello", concluye.