El director Sam Raimi (Posesión infernal) ha producido La posesión, película de terror basada en hechos reales, que ha dirigido el danés Ole Bornedal, uno de los creadores más influyentes del nuevo cine danés pese a haber aprendido directamente del thriller clásico estadounidense. A partir del artículo A Jinx in a Box, de Leslie Gornstein, publicado en LA Times en el 2004, que recogía el caso de una caja que contenía un espíritu maligno, sus responsables, comprometidos con el realismo para hacer terror, se han esforzado para que todo en la película sea de lo más auténtico. Con pavorosos insectos de verdad, escenarios particularmente abominables y sin excesos digitales.

Es la escalofriante historia de una familia que debe unirse para sobrevivir a la ira de una fuerza maligna desatada, pero, a diferencia de la mayoría de los filmes de este género, el terror vinculado a las fuerzas del mal pasa por el tamiz judío. Se podría decir que es una especie de El exorcista, inspirada también en un artículo sobre un exorcismo real practicado a una adolescente de Maryland, pero a la hebrea.