Aunque tiene claro que "uno no hace las películas que quiere, sino las que le ofrecen", Quim Gutiérrez Quim Gutiérrezse muestra feliz de su lugar al frente de las comedias más destacadas del último cine hecho aquí. Inició la temporada con 'La gran familia española', de Daniel Sánchez Arévalo, a quien debe su primera gran oportunidad en el cine, que le valió el premios Goya revelación: 'Azuloscurocasinegro'. Ahora llegan '¿Quién mató a Bambi?', farsa gamberra en la que encarna a un ejecutivo que acaba maniatado en el maletero de su coche, y 'Tres bodas de más', en la que intenta enamorar a una directiva a la que se le casan todos los exnovios a la vez.

"Me resulta divertido que me consideren una especie de galán de comedia, aunque todos estos personajes, distintos entre sí, lo que tienen el común es el agobio. Acaban perdiendo los nervios porque se empeñan en que las cosas sean como han planeado y no asumen que el destino va por libre". Él, en cambio, se considera flexible "y muy sano psicológicamente, porque he hecho los deberes sobre conocerme a mí mismo y sé cómo prestar a un personaje mis sentimientos sin dañarme en lo personal. Aunque siempre te dejas algo en el camino, lo que causa bastante estrés".

Barcelonés, de 32 años, comenzó siendo un chaval, en la serie de TV3 'Poblenou'. "Fue un acercamiento a la popularidad difícil de lidiar. No tenía entonces gran vocación y no me compensaba haber dejado de ser un adolescente normal, que es lo que yo quería". Tras un tiempo estudiando Humanidades, retomó su carrera en otras series y en filmes de José Luis Garci, José Luis Cuerda o Sánchez Arévalo

"Me siento muy bien cuando pienso cómo me van las cosas, aunque no soy actor las 24 horas del día. Me dedico a la interpretación, pero siento curiosidad por otras muchas cosas". La escritura, la fotografía y la moda están entre ellas. "Siempre me ha atraído el mundo de la estética y las tendencias. Aquí es poco frecuente en hombres heterosexuales como yo; en otros países, es mucho más común", subraya.