"Un tipo normal, amable, delgado, que podría estar sentado a tu lado en el cine y pasar desapercibido". Así define Víctor Clavijo (Algeciras, 1973) a su personaje en "Sicarius", un thriller que retrata 24 horas en la vida de un asesino a sueldo.
Con la corrupción policial y empresarial como trasfondo, esta ópera prima de Javier Muñoz -guionista de "Atasco en la nacional" (2007)- llega a los cines el próximo fin de semana, tras su paso por el Festival de Málaga.
"Es uno de los personajes más complejos que he hecho, sin duda", admite Clavijo en una entrevista con Efe. "No te pilla al alcance de la mano para investigar, no tienes referentes cercanos y te toca trabajar mucho con tu imaginación para aportarle credibilidad".
Aunque el guión no da muchas pistas sobre el pasado de este sicario, el actor gaditano, más conocido por la televisión y series como "El ministerio del tiempo" y "Gran Reserva", se buscó sus propias claves imaginando que era un policía expulsado del cuerpo.
"Alguien así tiene que saber cómo se mueve la policía, cómo investiga, no dejar huellas, cómo seguir a alguien, no mantener un contacto visual que le ponga en peligro", asegura. "Son cosas que me explicó un agente cuando preparaba otro personaje", para la miniserie "Una bala para el rey".
En este caso también han contado con asesoramiento policial, el de un profesional que ha seguido a sicarios en España.
"Aunque no lo parezca, este es un personaje real, que convive con nosotros. En España se producen 400 muertes a manos de sicarios, que se sepan, y luego están los muertos que no aparecen", unos 1.000 al año, según datos que maneja el guión.
Policías y alcaldes corruptos, abogados y empresarios sin escrúpulos forman la galería de personajes de "Sicarius", un paisaje que remite a casos que cada día asoman a los medios de comunicación.
"La película habla de las miserias de nuestra sociedad pero no pretende ser ejemplarizante ni sacar conclusiones", subraya Clavijo.
"Hay que entender que eso existe y en todo caso pensar que esos asesinos quizá no sean peores que algunos políticos que estamos descubriendo que se guardan tus ahorros y que te dejan sin seguridad social, sin asistencia o educación. Son distintos tipos de malos", añade.
Estilísticamente la película rinde homenaje a los clásicos del cine negro, desde la fascinación del protagonista por una mujer misteriosa que será el principio del fin de su carrera, a los encuadres teatrales, los juegos de sombras y los contrastes de luz.
"He intentado respetar esos códigos escritos desde los años 50 del siglo pasado", dice el director, Javier Muñoz.
La idea para "Sicario", según Muñoz, surgió durante el rodaje de "Atasco en la nacional". En una pausa, su director, Josetxo San Mateo le planteó la idea de seguir a un sicario toda la noche y ver cómo trabajaba y a partir de ahí nació el guión.
"Siempre pensamos que la violencia ocurre lejos, pero aquí hay asesinatos todos los días, unos más mediáticos que otros", señala Muñoz.
"A mí siempre me ha chocado ese telediario donde dan la noticia del muerto y entrevistan a la vecina del asesino que dice que ella le daba siempre los buenos días. Buscaba eso, que mi sicario fuera español, que pueda ser tu vecino, sólo que tiene un trabajo diferente".
