Nathalie Poza fue coronada la noche de este sábado como la mejor actriz protagonista en la gala de los premios Goya, por su papel de una sufrida hija en la película "No sé decir adiós".

Madrileña de 45 años, Poza se llevó el premio en la categoría de actriz principal ante sus rivales Penélope Cruz ("Loving Pablo"), Emily Mortimer ("La librería") y Maribel Verdú ("Abracadabra").

"Este camino es muy incierto, y hay mucha gente que me ha estado entusiasmando a lo largo de estos años", dijo la actriz al recoger el premio, dando las gracias a su madre, su padre y su hermano Pedro.

La Academia española del Cine quedó conquistada con la interpretación de Poza, para quien esta era su tercera nominación en los premios.

En la película, Poza da vida a Carla, una mujer que recibe una llamada para informarle que su padre, con quien no tiene relación desde hace años, está enfermo.

En la ópera prima de Lino Escalera, en la que también actúan Juan Diego y Lola Dueñas, la mujer emprenderá un viaje con su padre que servirá para que se reencuentren afectivamente, pero también para que Carmen asuma que debe despedirse.

Actriz de teatro y televisión, Poza dijo que asumió la interpretación de Carmen con "cierto vértigo", porque había perdido a su propio padre no mucho tiempo atrás.