Con la harina, la mantequilla, un huevo, una pizca de sal y tres cucharadas de agua se prepara una masa quebrada, trabajándola bien hasta que no queden grumos. Ya lista, se forma con ella una bola y se deja reposar en el frigorífico durante una hora. Pasado este tiempo, se extiende la masa sobre una superficie enharinada con ayuda del rollo de cocina y se forra con ella un molde redondo previamente engrasado que se introduce en la nevera.

Los mejillones y las almejas se abren al vapor, retirándoles sus conchas, y las gambas se saltean en un poco de aceite caliente y se pasan después a un plato. En el mismo aceite se rehoga el calamar limpio y cortado en trocitos. En un bol se mezclan los mejillones y las almejas, las gambas troceadas y el calamar; se agrega el tomate frito, las yemas batidas, el vaso de leche, dos cucharadas de harina, sal y pimienta al gusto.

Se espolvorea el preparado con una ramita de perejil picado y se vierte sobre el molde reservado. La superficie se alisa con ayuda de una espátula y se cuece en el horno precalentado, a temperatura moderada, durante 25 minutos o hasta que la quiche esté cuajada. En su punto, se retira del horno, se desmolda y se sirve en un plato o fuente llana rodeada de lechuga cortada en juliana.

Ingredientes para 4 personas:

200 g de harina, 150 g de mantequilla, 1/4 kg de mejillones, 1 calamar, 100 g de colas de gambas peladas, 100 g de almejas, 1 vaso de leche, 1 huevo, 4 yemas, 3 cucharadas de tomate frito, harina, aceite, perejil, pimienta, sal.