Cocinar al vapor es una técnica antiquísima, fácil y económico pero es que además, su técnica es la más respetuosa con los alimentos. Realza sus nutrientes y conserva perfectamente las vitaminas y los minerales de los productos. Por lo general, la cocina al vapor se asocia a las hortalizas y vegetales, que crean un plato multicolor. Esta mezcla tan alegre tiene un efecto psicológico óptimo que produce satisfacción y que ayuda al metabolismo a asimilar progresivamente los nutrientes.

Para cocinar al vapor necesitamos una vaporera (o canasta de bambú) con el fin de separar los alimentos del agua caliente. Pero si no dispones de este artilugio o no quieres llenar la cocina con más "trastos", te enseñamos cómo lograr un buen resultado con otros mecanismos.

Si tienes un colador y una olla... ya tienes una vaporera

Llena una olla de agua y coloca un colador encima; tienes que tener cuidado de que éste no toca al agua y por tanto el alimento no se moja, simplemente recibe el vapor.

Lo único que tenemos que hacer es poner un colador en una olla llena de agua siempre con cuidado de que el agua no toque el colador. Ponemos las verduras encima del colador, el agua a hervir y tapamos mientras se cocina al vapor. Debemos estar atentos a que el agua no se evapore por completo; si es así, añadimos en la olla agua caliente para que los alimentos sigan cocinándose.

¿Cuánto tiempo hay que dejar los alimentos con el vapor? Variará en función de los ingredientes pero por lo general entre 15 y 25 minutos. Lo único que hay que añadirles a éstos es una pizca de sal.

Además, esta vaporera casera también se convierte en un método ideal para recalentar la comida: no sólo evitarás que se reseque sino que también recuperarás todas las propiedades.

Almejas al vapor

Ingredientes:

500 gr de almejas, 1/2 limón, 1 diente de ajo, perejil picado

Preparación:

Para limpiarles la arena, pon las almejas (desechando las rotas) en un recipiente cubiertas de agua con una cuchara de sal gorda y otra de vinagre durante al menos media hora en la nevera. A continuación, lávalas bien y colócalas encima del colador con la olla y agua caliente debajo hasta que se abran. En una sartén puedes dorar unos ajos en aceite de oliva y echarle un chorrito de vino blanco hasta que reduzca. Ahora mezcla las almejas con esta salsita y disfruta de este plato tan sencillo y delicioso.

A favor del vapor:

  • Reconcíliate con el auténtico sabor de los alimentos. Lograrás sensaciones suaves, así que son platos ideales para niños.
  • Esta técnica es sencilla y económica (ahorra, en aceite, energía calórica, utensilios de cocina...)
  • Comes menos: la técnica no crea adicción como en el caso de las frituras, las azúcares y las grasas.
  • Se conserva perfectamente en el congelador.
  • Purifica la sangre y limpia el colon: llena de energía tu organismo