Si aún no tienes planes para el puente de diciembre o vas a disfrutar de unos días libres en Navidad, no te pierdas la oportunidad de visitar dos de las ciudades con más historia de Europa, Roma y Budapest.

Son la escapada perfecta para cuando sólo se tienen unos pocos días libres por su tamaño y su cercanía con España. Roma, conocida como la ‘Ciudad Eterna’, es la ciudad con la más alta concentración de bienes históricos y arquitectónicos del mundo. Pasear por sus calles nos transporta a la época romana. El Coliseo, el Circo Romano, el Foro o el Palatino son lugares de visita obligada. El Vaticano es también uno de sus mayores atractivos. Pero Roma tiene miles de encantos más como la Plaza de España, la Fontana de Trevi, el barrio de Trastevere, la Boca de la Verdad o la Plaza Navona.

La gastronomía de Italia es otro de sus puntos fuertes, la pasta, las pizzas o los helados son algunos de los productos que se pueden degustar a precios muy asequibles. Y es que otra de las ventajas de esta ciudad es que su oferta hostelera y hotelera es tan amplia que Roma se adapta a cualquier bolsillo. Por menos de 60 euros puedes alojarte en un hotel de 3 estrellas de Roma, ya sea por el puente de la Constitución o en las vacaciones de Navidad.

La capital de Hungría recibe el nombre de "La Perla del Danubio". Este rio es el segundo más largo del Viejo Continente por detrás del Volga y lo cruza de Oeste a Este, atravesando países como Alemania, Austria, Hungría o Rumanía. De todas las ciudades por las que pasa, Budapest está considerada como la más bella.

El Castillo de Buda es uno de los monumentos más representativos de Budapest junto con el Puente de las Cadenas. Su Parlamento, el tercero más grande del mundo, tras el rumano y argentino, es fotografía obligada. El Bastión de los Pescadores, la Sinagoga Judía, la Ópera o la Plaza de los Héroes son además otros puntos de interés de la ciudad.

Entre sus platos más característicos destacan todos los menús relacionados con carne como la paprika. De hecho, es el condimento clave de uno de sus platos más populares, la sopa goulash, la cual también se adereza con verduras.

Si deseas alojarte en un céntrico hotel de Budapest a las orillas del Danubio de tres estrellas, podrás hacerlo por menos de 60 euros.