España está plagado de rincones maravillosos para pasar los días de verano. Además de en sus idílicas playas, podemos disfrutar con varias piscinas naturales que se han formado en lugares de ensueño.

Muchas de ellas contienen aguas provenientes directamente del mar, lo que supone poder sumergirse en un baño de placer y relax y poder mejorar la salud gracias a todos los beneficios que aporta la sal al cuerpo.

A continuación te desvelamos cuáles son algunas de las mejores piscinas naturales de España en las que disfrutar en tus vacaciones:

El Charco Azul

Está a menos de media hora a pie y a casi dos kilómetros del barrio de El Risco, en la carretera de Agaete a La Aldea, en Gran Canaria. El Charco Azul es un pequeño caidero natural de unos 20 metros de altura, cuya formación geológica ha forjado a sus pies una pequeña piscina de múltiples tonalidades. A este minúsculo lago se le han ido sumando otros en su bajada por el barranco.

Aniol d'Aguja

En Cataluña nos encontramos la poza del Gorg blau de Sant Aniol que se sitúa exactamente en la comarca de La Garrotxa. Se trata de una poza con un salto de agua, perfecta para darse un buen baño en plena naturaleza.

La piscina natural de Aniol d'Aguja / Wikimedia

Fuentes del Algar

En Alicante podemos disfutar de un baño en la piscina de Fuentes del Algar, a tan sólo 15 kilómetros de Benidorm. El paraje esta acondicionado para todo tipo de públicos y cuenta con numerosos servicios turísticos. Podemos aprovechar la visita para hacer una excursión hasta los antiguos bancales y su cueva.

La piscina natural de Fuentes de Algar / Wikimedia

Las Chorreras

En Cuenca se localizan las piscinas naturales conocidas como Las Chorreras. Sus aguas de color turquesa son su atractivo principal y durante nuestro paseo podemos encontrar cascadas y cuevas dignas de un cuento de hadas. Debe su nombre a los "chorros" de agua que se pueden contemplar a lo largo del cauce del río Cabriel.

La piscina natural de Las Chorreras / Wikimedia

A Chavasqueira

Las personas con artrosis, acné o dermatitis no deben dejar de visitar las termas de Ourense. Sus aguas, que alcanzan hasta los 43º, son el mejor tratamiento natural. Las pozas o termas de A Chavasqueira están situadas en los márgenes del río Miño y son de uso gratuito. Sus aguas son bicarbonatadas, fluoradas, y sulfuradas de mineralización media.

La piscina natural de A Chavasqueira / Wikimedia

Garganta de los Infiernos

Cascadas y más de trece pozas rodeadas de una espectacular flora y fauna es lo que se encuentra el viajero que llega hasta el Valle del Jerte, en Cáceres. Otro de los grandes alicientes de estas piscinas naturales son sus vistas a la Sierra de Gredos.

La piscina natural de Garganta de los Infiernos / Wikimedia

El Caletón en Garachico

En las Islas Canarias encontramos numerosos parajes en los que sumergirnos en las mejores piscinas naturales de España. En la isla de Tenerife se sitúa una de las más importantes, conocida como El Caletón. Destaca sus formas creadas por la acción de la lava del volcán de Trevejo, que entró en erupción en 1706.

La piscina natural de El Caletón / Wikimedia

Fontcalda

En esta ocasión viajamos hasta Tarragona para encontrarnos una piscina natural rodeada de montañas entre el río Canaletes. En esta zona el río forma diversas pozas de aguas limpias y cristalinas, en las que darse un baño en los días de más calor.

La piscina natural de Fontcalda / Wikimedia

Beceite

Situada en Maestrazgo, en Teruel, se localiza una impresionante piscina rodeada de los cañones formados por el río Matarraña. En esta zona podemos encontrar algunas de las pozas más bonitas de Aragón, con aguas cristalinas bordeadas por espectaculares paredes de roca caliza.

La piscina natural de Beceite / Wikimedia