Aún no se ha estrenado. No sólo no se ha estrenado sino que aún no ha comenzado a grabarse, es más, En tu casa o en la mía está en fase de preproducción. Aún no hay nada de eso y ya me subo por las paredes. Lo que sí sabemos es que En tu casa o en la mía es un programa de entrevistas para La 1, que está preparando una productora, la de Entre todos o T con T, aquellas mandangas que emitía la tele pública, la primera con un tufo obsceno a caridad catódica, la segunda un magacín sin garra, de esos que piensan más en no molestar al amo que en mirar alrededor con agallas para contarlo, y que ya tiene presentador, nada menos que Bertín Osborne.

La televisión pública tirando la casa por la ventana. A lo grande. Apostando por el periodismo sin matices. Hace tiempo a este señor lo llamaban a los programas para cantar o hablar del ardor de su vida privada. Ahora no. Desde hace unos años a este donjuán simpático y casposo lo invitan para que hable de política, y por eso recorre platós que van de Intereconomía a 13tv, ambas ancladas en esa derecha tan radical como paródica, o Telecinco, que lo pasea por alguno de sus programas porque tiene el perfil de los personajes que encajan en Mediaset.

Me importa poco que este señor acuda de invitado a programas varios para decir que es de derechas o que mientras hace el amor piensa en las Pili y Mili madrileñas, que Aguirre & Cifuentes -¿sólo yo creo que suenan a bufete del hampa?-tienen su puntito. Todo eso me da igual. Pero lo que sí debería de importarnos es que la tele pública, sorda y ciega al dolor de la audiencia, apueste por este señor para hacer entrevistas. En La Sexta, Jordi Évole. En Cuatro, Pepa Bueno. En La 1, Bertín. Cuánta ofensa y burla.