Pablo Iglesias se ha convertido en uno de los protagonistas de la semana. Este viernes el director de laSexta, Antonio García-Ferreras, ha negado que en el ´Al rojo vivo´ se esté censurando a Iglesias, y ha añadido que si no ha acudido todavía a su programa es porque no ha querido.

Lo cierto es que el líder de Podemos es uno de los tertulianos habituales de ´Las mañanas de Cuatro´ de Jesús Cintora, competencia directa de ´Al rojo vivo´, y que es más común ver a representantes de ´Podemos´ en el canal de Mediaset que en el de Atresmedia.

Este lunes sin ir más lejos, Ferreras afirmaba que nadie de la formación política había querido explicar la relación de Iglesias con la formación abertzale ´Herrira´ y fue el propio Monedero el que le respondió desde el programa de Cintora.

Iglesias, contra la prensa

Este viernes además, Pablo Iglesias ha arremetido contra la situación de la prensa, la falta de libertad de expresión y lo predecibles que son la mayoría de los periodistas y ha propuesto algún tipo de control público a los medios para garantizar que prestan un servicio a los ciudadanos.

Lo ha hecho en un encuentro informativo en la fundación Diario Madrid para presentar el libro "Conversación con Pablo Iglesias", que ha escrito Jacobo Rivero, un "periodista amigo" como lo ha definido, y que es el resultado de una conversación con el eurodiputado de Podemos tras las elecciones del 25 de mayo.

Un acto que ha girado en torno a los medios de comunicación y que ha provocado más de una objeción por parte de los propios periodistas, algo que Iglesias ha encajado bien, porque, como ha reconocido, es un "provocador" en el sentido de buscar "la manera de despertar", en este caso, a la de las personas que estaban presentes.

Lo que no ha hecho ha sido concretar cómo se debería establecer ese control a los medios y ha señalado que si fuera necesaria una legislación de prensa debería ser redactada por los informadores, que son los que "sufren en sus carnes" los límites a la libertad de expresión, la precariedad laboral o los salarios bajos. "Yo no tengo una fórmula mágica y aunque podamos ayudarles, el protagonismo lo van a tener ustedes", ha subrayado.

Siguiendo con este tema, ha insistido, "nadie quiere para su país medios como Telemadrid o Canal Nou" que actúan como instrumentos de propaganda y tampoco "se puede consentir", ha señalado, que las grandes empresas, que son las que controlan los medios, "digan a los periodistas lo que tienen que escribir" y por eso ha hecho una apuesta decidida para acabar con la concentración de empresas periodísticas.