El teatro Colón impulsaba hace tres años una iniciativa formativa encaminada a formar a personas interesadas en la interpretación teatral, con o sin experiencia, y pertenecientes a grupos sociales homogéneos que puedan aportar una visión particular a una pieza. La obra seleccionada fue un clásico de la literatura, el Don Juan Tenorio de José Zorrilla, que en las anteriores representaciones fue interpretada por jóvenes y mujeres y en esta ocasión será representada en el Colón por un elenco de actores jubilados. La cita se celebrará esta tarde a partir de las 20.30 horas.
El director Ricardo Martín ha tomado las riendas de un equipo en el cual se encuentran personas "con experiencia sobre las tablas y algunas que nunca antes habían interpretado un papel en escena". La coincidencia generacional se traslada del escenario a las bambalinas, y es que todo el equipo detrás del Don Juan Tenorio Experimentado "está compuesto por personas jubiladas, desde el vestuario hasta la producción", señala Martín.
La selección de los actores, realizada a través de un casting, contó con la particularidad de una mayor afluencia de mujeres que de hombres, lo que obligó a algunas de las actrices seleccionadas a adoptar papeles masculinos en la obra original. Una de las actrices del elenco, María Dolores López, recalca como principal reto de su primera experiencia teatral el hecho de que la pieza de desarrolle en verso: "Es dificilísimo, porque no solo tienes que aprender lo que tienes que decir, sino también llevar un ritmo, que las estrofas cuadren", apunta, sin descartar volver a participar en otra obra "a poder ser, cómica".
Para otro de los intérpretes, Francisco López, esta no es su primera incursión en el teatro, aunque sí es una de las que "más satisfacción y seguridad en el escenario" le ha aportado para la representación de futuras obras, y la que le ha llevado a debutar con el verso. "Trabajando y repasando la letra, y después en ensayándola, que es lo más difícil, uno consigue quedarse con ella casi sin darse cuenta", explica.
Experimentado en las lides escénicas, el director de la obra explica que el hecho de haber trabajado en este proyecto le ha aportado una gran satisfacción. "Me aporta una satisfacción inmensa, yo siempre me he movido en el teatro escolar, con adolescentes y básicamente en un mundo que es el de la comedia latina y la tragedia griega y esto ha sido un mundo totalmente nuevo para mí, un montaje profesional", señala.
Las personas que esta tarde acudan al teatro Colón para ver el resultado de esta acción formativa podrán ver, como adelanta Ricardo Martín, "una representación lo más ajustada al espíritu de Zorrilla, donde haya un apoyo musical y lumínico espectacular". En la voluntad del director está el ser lo más fiel posible a la idea del Don Juan Tenorio de que "mientras uno esté en el recuerdo de sus sucesores, tendrá una vida en el más allá".
