En música de cámara, es frecuente la combinación de tres instrumentos que suelen ser o bien tres arcos (violín, viola y violonchelo) o dos arcos con piano (violín, violonchelo y piano). De esta última combinación, hay abundante literatura musical, con auténticas obras maestras de Haydn, Mozart, Beethoven, Schubert, Mendelssohn, Brahms? Pero también se han creado otros acoplamientos como el que junta viola, clarinete y piano. Tres instrumentos que producen el sonido por muy diferentes medios -cuerda, viento y percusión-; y, por tanto, una combinación arriesgada por la dificultad de equilibrar los tres distintos modos de producir el sonido. Aunque no hay un repertorio demasiado amplio, no faltan obras de esta naturaleza. Y así, el Trío Huillet, ha podido componer un programa poco habitual y de extraordinario interés. El gran mérito: lograr ese ideal balance sonoro, merced al talento de los tres artistas, incluido el jovencísimo clarinetista (veinte años) que, a tenor de lo escuchado, puede realizar una importante carrera internacional. El público disfrutó mucho con unas obras muy bellas. Por su rareza en los programas, hay que destacar las ocho preciosas piezas de Max Bruch (solo faltaron la 1 y la 8; la número 2, tan mendelssohniana, fue ofrecida como bis). Clara y Thierry son habituales en nuestra Filarmónica. Él es el autor de la interesante composición - Crisis- que cerró el concierto.