Las películas musicales más famosas de la historia del cine sirven de inspiración para Bailamos bajo la lluvia, la nueva exposición que comparte desde la pasada semana la fotógrafa Ana Amado en Afundación. La muestra, una colección de más de medio centenar de retratos en blanco y negro y color, captura a los usuarios de la Asociación Down Coruña imitando conocidas escenas musicales de la cinematografía, con el objetivo de romper los prejuicios y favorecer la integración de este tipo de colectivos en la sociedad.

La vía escogida para ello ha sido el baile. "Les pregunté qué les gustaba hacer y todos coincidieron en que les encantaba la danza y la música", explica Amado, que tomó como "base" de la serie el filme Cantando bajo la lluvia. Además de contribuir al título de la colección, la pieza de Gene Kelly y Stanley Donen marcó el tono de toda la muestra. Su influencia destaca especialmente en varias de las imágenes, en las que los jóvenes se exponen a la lluvia mientras bailan como Kelly hacía en el largometraje. "Aparecen empapados, imitando la escena. Se lo pasaron muy bien", asegura la fotógrafa, que tomó también como referencia movimientos de artistas como Michael Jackson y de películas como Fiebre del sábado noche y La la land.

Las sesiones se realizaron por grupos, durante tres fines de semana. El proceso lo recoge en la muestra el fotoperiodista Rober Amado, cuyo vídeo complementa las imágenes hechas por su hermana en la exposición. "Había una organización muy rigurosa, pero el trabajo fue muy fluido, y empezaron a ocurrir cosas muy diferentes", cuenta la artista en alusión a los retratos de los usuarios de la asociación. En un principio, la idea inicial se limitaba a las escenas de baile. El resultado final, sin embargo, acabó añadiendo color a estas estampas en blanco y negro con los primeros planos de los participantes, que posaron con la arquitectura del propio centro como telón de fondo. "La idea surgió de forma espontánea. Creí que sería bonito hacer fotografías en las que fueran mucho más protagonistas", apunta Amado, que conocía ya el edificio por un trabajo sobre su estructura realizado en un proyecto anterior.

El de Bailamos bajo la lluvia fue un encargo de la Asociación Down Coruña. La fotógrafa afrontó la petición determinada a construir un discurso diferente, que se acercase a la cotidianidad y se distanciase de la condescendencia con la que se suele presentar a las personas con diversidad funcional. La experiencia, para Amado, fue además todo un descubrimiento. A pesar de la habitual carga social de sus imágenes, se trataba de la primera vez que la fotógrafa entraba en contacto con gente con Síndrome de Down, un colectivo con el que, asegura, volvería a trabajar sin dudarlo. "Para mí fue una cura de humildad. Crees que no tienes prejuicios, pero los tienes. Y la verdad es que no tienes ni idea", explica la artista, que anima a la sociedad a hacer un esfuerzo de "inmersión" para "conocer más" la realidad de las personas con distintas capacidades.

El acercamiento que la gallega propone es a través del arte. También de la normalidad, un enfoque que ha trasladado a su objetivo a la hora de tomar las instantáneas. "El discurso habitual es de cómo les cuesta hacer algo, y de cómo al final lo logran. Refleja las dificultades. Nosotros quisimos huir de eso con una actividad natural como el baile, común a cualquier joven de su edad", cuenta Amado. Poniendo el foco en "aquello en lo que somos iguales", la artista apostó del mismo modo por combatir la "resistencia" ya desarrollada por los espectadores ante todo lo narrado con un prisma "negativo". "Si el discurso es positivo es más fácil conseguir la complicidad. Lo importante es que la gente se acerque, y espero que con la muestra podamos conseguirlo", añade la artista.

Bailamos bajo la lluvia permanecerá abierta en Afundación hasta el próximo 23 de junio. Podrá visitarse de 17.00 a 21.00 horas de lunes a viernes, así como de 12.00 a 14.00 y de 17.00 a 21.00 horas los sábados.