La danza contemporánea se tiñe de feminismo este otoño con el ciclo de TRC Danza, que inaugurará esta tarde su nueva temporada con Oasis Paraíso. El programa, fruto de las residencias que daban cabida el año pasado a propuestas artísticas de autores como Begoña Cuquejo, Areta Bolado y Diego Martínez Buceta, mostrará hoy sus resultados en el Teatro Rosalía, donde convertirán en baile sus reflexiones sobre violencia de género, evasión y desigualdad.

El espectáculo estará compuesto por tres obras, que darán comienzo a las 20.30 horas. Las artistas Begoña Cuquejo y María Roja serán las que abran la jornada con su , una pieza bautizada con la suma de las matrículas de sus coches, que las autoras emplean como referencia al nomadismo que se vive hoy en día. "Actualmente, el cuerpo se está moviendo de un lado a otro, con trabajos precarios. La gente habita más tiempo en su coche que en otros lugares", explica Cuquejo, que señala el hogar y el vínculo que la mujer mantiene con él como otra de las cuestiones en las que busca profundizar su danza.

Con la pieza, el dúo abarca "desde el punto de vista feminista" este ir y venir contemporáneo, para el que han recogido en su investigación objetos que "hacen casa" para la plantilla del Rosalía. Manteles, impresoras, cafeteras y hasta trajes de boda acabaron conformando la peculiar colección de las intérpretes, que bailarán al ritmo de la música que Juanma Lodo hará a partir de los objetos. "Contaremos la historia que tienen y por qué crean casa para las personas que nos lo dieron", cuenta la creadora, advirtiendo de que se trata de una pieza que está "todavía en proceso".

En el mismo estado, y a la espera de alcanzar un formato mayor, se encuentra el espectáculo de Areta Bolado y Ailén Kendelman. Las integrantes de A Panadaría se sumergirán de lleno en el machismo del reguetón comercial para ofrecer su propia versión del género, en el que sustituirán los tintes ofensivos de las letras por el empoderamiento de la mujer. " Barba Inguinal es una banda de reguetón feminista. Cogemos el estilo y le damos la vuelta, tanto en las letras como en los movimientos", explica Bolado, segura de que "el feminismo se puede hacer desde la cadera y no solo desde la cabeza".

Sobre el escenario, ni ella ni Kendelman dudarán en "perrear" al son de sus composiciones, en las que tocarán temas como el machismo, la violencia de género y la gordofobia desde la piel de los personajes que han creado para la ocasión: Peluda Queen y Dona Lambecricas. Antes, darán una pequeña charla explicando el proyecto, que surgía por disidencias entre cabeza y corazón. "Tanto a Ailén como a mí nos encanta el reguetón, pero no encontramos canciones con las que nos sintamos identificadas. Y pensamos: 'Si no las hay, tendremos que hacerlas", recuerda con humor la artista, que cerrará con su número la jornada.

Precediéndolo, tendrá lugar la función de Diego Martínez Buceta. El bailarín será el único que presente una pieza ya concluida, en la que reflexiona sobre "el deseo de evasión" bajo el título de As vacacións máis longas. "Es una obra en la que partí de Aullido, de Allen Ginsberg, y de textos de otros escritores de esa generación. El resultado es un trabajo muy íntimo, ligado a mis experiencias personales", apunta el autor, que señala como "fundamental" para su desarrollo la estancia en Residencias Paraíso. "Espacios con dotación económica para soportar la creación de los artistas hay pocos. En la danza las oportunidades no son muchas, pero esta residencia fue como una isla", concluye.