Cuando Jorge Cabezas pintaba, la música y su pincel se convertían en uno. Los discos eran su segunda pasión, y se rodeaba de ellos en su estudio, en los que sonaba desde el Rey del Rock, Elvis, hasta el gasóleo incombustible de The Beatles. El artista coruñés siempre ha sido un melómano incorregible, y aquella faceta se trasluce desde los inicios en sus pinturas. Sus trazos rápidos y enérgicos, como el riff de una guitarra bien afinada, llegan directos al ojo del público, ante el que le gustaba construir murales, y esbozar desde las siluetas del Puerto hasta la arena de la playa de Riazor.
Con aquel gusto por la música, el artista podría haberse consagrado al escenario. No lo hizo, pero decidió en cambio forjar un círculo de partituras, que le ha rodeado desde entonces en forma de sus más allegados. El coruñés Xoel López, el líder de Os Resentidos Antón Reixa o el de Siniestro Total, Julián Hernández, son algunos de esos intérpretes que se han convertido en sus grandes amistades. Durante décadas, más de una decena de cantantes le han respaldado en su carrera como él ha hecho en la suya, uniendo ambas disciplinas con un puente de afecto más allá de la creatividad.
A pocos ha habido que insistir para que participaran en Cabezas LiveAid2.El pintor, dicen sus amigos, siempre se ha volcado con ellos, y este concierto— que tendrá lugar este jueves 23 de mayo en el Garufa Club (21.00 h.)— es un modo de devolverle el favor. En el local se reunirán una docena de artistas de su entorno conducidos por Paco Lodeiro, entre los que desfilarán nombres como López, Reixa, Hernández, Los Mecánicos, Electra y Carolina Rubirosa. Tocarán "todos con todos", uniendo fuerzas para lograr el lleno, con el que esperan recaudar 3.000 euros para ayudar a la rehabilitación del coruñés aquejado de hemiplejía tras un accidente cerebro-vascular.
"Yo estoy muy atento a su evolución médica, y creo que este es un paso más para que se vaya recuperando tanto clínica como anímicamente", dice el cantante de Os Resentidos, que se declara admirador del "coraje" y el "humor negro" del pintor. El artista compartirá escena con Los Mecánicos, a los que el hilo conductor del concierto les sienta como un guante. Será la década de los 60, la época musical preferida de Jorge Cabezas, la protagonista de las actuaciones,en las que sonarán desde versiones hasta temas propios como los del último disco de Álvaro Dorda.
Algunos, como Rubirosa, han escogido su repertorio únicamente en función de su amigo. "Conozco su gusto, y he elegido las canciones pensando en ello", dice la cantante,que destaca el carácter "entrañable" con el que el coruñés la recibió a su llegada a la ciudad. Lamente de Fernando Esclusa, líder de Los Mécanicos, también se llenade recuerdos cuando se menciona a Cabezas."Hemos compartido momentos, alguna vez fuimos juntos de tour. En Portugal le vendimos varias obras mientras dormía, le hicimos de marchantes de arte", rememora entre risas.
La de este jueves será la segunda ocasión en la que el músico rendirá homenaje a su amigo micrófono en mano. Ya lo hizo en otra gala en el Garufa Club, poco más de un año después del accidente de Cabezas,que se acercará a la ciudad para disfrutar del espectáculo. Estavez, sus organizadores—Chema Ríos y el fotógrafo Juan Rodríguez—han querido que coincidiera con la exposición Jorge Cabezas is back!, que reúne una selección de sus pinturas hasta el 30 de junio en la Fundación Seoane. Se trata de un modo de recordar el valor de su carrera, y "no hablar de él en pasado",como apunta Rodríguez, que convertía en imagen "desde chaval" su trayectoria.
"Jorge no era, Jorge es. Su arte lamentablemente tuvo un fin, pero estamos intentando ayudarlo",explica el fotógrafo, cuyas instantáneas formarán parte de un catálogo sobre el coruñés. El artista invita a todos, "amigos o no", a acercarse al concierto de esta semana, para el que ya pueden adquirirse las entradas de forma anticipada, por 10 euros, en el Bristol Bar, el Garufa Club y Umaguma.
