"¡Que el público difunda la noticia! ¡Que sea trending topic nacional! ¡Decid que por fin La Cubana se instala en A Coruña!". Esas son algunas de las proclamas que pudieron escuchar ayer los viandantes de la Marina, cuando se toparon en su camino con la presentación del nuevo espectáculo de la compañía teatral. Armados con un despliegue de cartelería, confeti y mucha música, la formación catalana dejó claro ante los curiosos que había aterrizado en la urbe, e invitó a los espectadores a "disfrutar" y "dejar los problemas en casa" con su teatro.

La excusa la ofrecerán desde hoy y hasta este domingo en el Rosalía con Adiós Arturo, un montaje que le da la vuelta a los funerales con su habitual tónica de comedia y color. Tras doce años sin visitar A Coruña, donde representaron en 2007 Cómeme el coco, negro, la compañía trae ahora una pieza sobre "ese teatro que todos hacemos en la vida cotidiana" y que pasa, como indicó su director, Jordi Millán, "inadvertido".

"Lo hacemos en el trabajo, en el metro, en el colegio y en el mercado, pero es teatro", advirtió el artista, que mira en esta ocasión a las convenciones sociales que rodean los velatorios. El de Arturo Cirera Mompou, un creador "polifacético" nacido "en la calle San Andrés", es el motivo de su show en la urbe, donde le despedirán esta tarde a las 20.30 horas. El domingo habrá otra función a las 19.00 horas, y ración doble el viernes y el sábado, cuando el grupo celebrará a las 18.00 y 22.00 horas los 101 años que vivió el artista.

"Arturo era una persona a la que no le gustaban los ritos sociales. Tenía claro que cuando desapareciera del mundo quería una fiesta, pero la familia no encontraba a una funeraria que quisiera organizarla, así que nos lo dijeron a nosotros", explicó el director de La Cubana. La compañía ha preparado una "ceremonia" que se ríe de la parafernalia de la muerte, y que repasa en escena las facetas más ocultas del difunto. Para el fallecido han creado toda una biografía ficticia que parte de A Coruña „donde "nació en 1918"„ después de que trasladaran a su padre como médico desde Cataluña.

La Cubana presenta 'Adiós Arturo' en el teatro Rosalía

La Cubana presenta 'Adiós Arturo' en el teatro Rosalía

"Estudió en el Eusebio da Guarda, y a los 12 años ya era un niño prodigio", relató Millán durante la presentación, que incluyó a un loro real. El ave forma parte del elenco de actores, que se ven envueltos en la obra en un frenesí en el que llegan a interpretar hasta ocho roles cada uno. Entre ellos, acompañando a nombres como Nuria Benet, Toni Sans o Babeth Ripoll, se encontrará Ernesto, el pájaro, con la misión de "partir y repartir toda la historia" desde escena. "Arturo no se había casado, así que el loro era su única familia. Podemos decir que es la cabeza de duelo", apuntó el director.

Millán, que también es autor de la obra, repasó en su intervención el histórico de la pieza, que se estrenó en Valladolid en mayo de 2018. Desde entonces ha pasado ya por 29 ciudades españolas, en las que La Cubana ha realizado cerca de 300 funciones, con 200.000 personas como cifra de asistencia. El edil de Cultura, Jesús Celemín, invitó en la rueda a engrosar la cantidad, que seguirá sumando en su próxima parada en Vigo del 26 al 29. El edil definió a la formación como un grupo "loco y emblemático" con "más de 40 años" en carretera, e insistió en acudir al teatro para disfrutar de la "ilusión" y la "magia" que ofrece.

UNA VIDA DE TRIUNFOS

Adiós Arturo se propone desvelar los entresijos de la vida de Cirera, que cultivó ramas tan diversas como la escritura, la pintura, la dramaturgia y la composición musical. La compañía ha dotado a su personaje de multitud de puntos jugosos, situándolo en muchos de los momentos que han marcado la historia del último siglo. De este modo, Cirera Mompou estuvo en las revueltas de mayo del 68, y en la cena en la que se disolvieron los Beatles. También compró el primer Seat 600 de España, y conoció a Richard Nixon, que le invitó al lanzamiento del Apolo 11.