Para Enzo G. Castellari, el 2019 olía a apocalipsis. Al menos así lo plasmó en Los nuevos bárbaros, el filme que dirigió en los años 80 y ambientó en la época actual. El título italiano proyectaba un mundo postnuclear, en el que las personas luchaban por reconstruir sus vidas tras el desastre atómico. El presente, pensaba Castellari, sería una distopía, ese reverso oscuro que el futuro siempre parece esconder para la pantalla grande.

El largometraje es uno de los preferidos de Tonecho Otero, que lo ha incluido en la selección de este año para el Festival de Cinema Fantástico da Coruña (FKM) que dirige. Tras su edición del 2018, centrado en la provocación, el ciclo abordará la próxima semana una nueva temporada, en la que las utopías y las distopías serán las protagonistas. El programa arrancará el 12 de octubre, y se extenderá por distintos recintos hasta el domingo 20. Entremedias, la ciudad rendirá culto al género con cerca de 50 proyecciones, mesas redondas y exhibiciones de maquillaje, que tendrán como antesala las ilustraciones XXL de Xurxo G. Penalta en la Fundación Luis Seoane.

Las obras del artista, que inaugurará su exposición a las 13.00 horas, encajan como un guante en el FKM. "Uno de mis temas recurrentes son los paisajes futuristas, los vehículos espaciales y las ciudades fantásticas. Desde que tengo recuerdo he visto películas de ciencia ficción, y eso de chaval te impacta mucho", explica el coruñés. El más de medio centenar de piezas de la muestra darán cuenta de ello, ya incluso desde el formato. Presentadas a modo de pósteres de cine, como aquellos de los 40 en los que de pequeño buscaba inspiración, Penalta compartirá bocetos, originales y referencias a series como Stranger Things y Matrix, junto al cómic de creación propia 8House Kiem.

Como primicia, la exposición contará con varias páginas inéditas de la segunda entrega del trabajo, que todavía no está disponible para el público. Sus procesos de creación serán otro de los ejes de la muestra con un vídeo a cámara rápida, en el que se podrá ver improvisar al coruñés. A la hora de dibujar, reconoce, los bocetos se le suelen acumular sobre la mesa, sobre todo ante obras grandes que exigen "pensar de antemano". Desde que cruzara el charco en 2008, y camelase con su estilo "barroco" a los productores de cómic de Norteamérica, las realiza desde Galicia para todas partes del mundo, incluso para lugares, dice, que todavía no sabe "ni situar en un mapa". "Me piden obra de puntos como Suiza y Alemania, y yo hago un trabajo muy detallado. Mi referente estético son películas como Star Wars o Blade Runner", apunta el creador.

La exhibición de Penalta estará abierta hasta el día 27, extendiendo el FKM una semana más allá de su gala de clausura (20 de octubre). En ella se proclamará a los ganadores de las competiciones de guion y cortometrajes, así como el de largos, que quita como novedad este año el cerco de la ópera prima para abrirse a todo tipo de creación.

Al margen de los concursos, el festival contará con proyecciones tanto en la Seoane como en el Centro Galego de Artes da Imaxe (CGAI), entre las que se repartirá un abanico de propuestas variadas. Otero ha abarcado en esta edición "desde el cine de ensayo y experimental hasta el más macarra y desvariado", con exponentes como Los invasores del abismo, de Ruggero Deodato, y Stereo, el debut cinematográfico de David Cronenberg.

El canadiense será el homenajeado este año en el ciclo, que celebrará los 50 años de aquel primer largometraje el jueves 17 en el CGAI. "Es un director mítico en el cine de terror y ciencia ficción, y uno de nuestros favoritos. Su primera película, una sociedad utópica, es bastante desconocida", justifica el organizador. En las obras recogidas este año, todos "los mundos felices se acaban convirtiendo en infelices para quienes los habitan". Son esas dos caras las que cautivaron a la dirección del ciclo para escoger la distopía como tema, una línea con la que quieren recordar las "películas apocalípticas de los 80 y la contrapartida del cine utópico de los 60".

"Muchas de nuestras películas encajan en esas dos categorías: el mundo feliz de la tecnología y su reverso oscuro", dice Otero, que destaca el visionado en el CGAI del filme Las brujas de E'lente. Se trata de un título gallego realizado por Lutra Films, y que no llegó a distribuirse en salas. Este año, el FKM lo recupera como parte de su filosofía de apoyo a las producciones de la tierra, a las que da espacio en secciones como la de Fetus, dedicada a las películas rodadas en gallego en la autonomía.

"Nos parece importante darles apoyo porque, aparte de los thrillers de Vaca Films, se hacen muy pocas obras de género fantástico en Galicia", lamenta el organizador, que pretende con su ciclo "devolverle al cine" su carácter de "experiencia colectiva". A alcanzar la meta contribuirán las mesas redondas que albergará la Seoane, con ponentes como Xosé Nogueira y Fernando Agrasar. También lo hará la celebración de la Zombiewalk, que tendrá lugar el día 31, e incluirá una fiesta y un concurso de disfraces.

Un año "raro"

Esta edición, la marcha zombie contará con una clase magistral del maquillador Alberto Hortas, que será en esta ocasión solo presencial. "Antes era práctica, pero esta vez no nos lo podíamos permitir. La caída del Museo de Arte Contemporáneo (MAC) fue un palo importante, porque era el patrocinador privado que teníamos", explica Otero.

El director asegura que este año ha sido para el festival "un poco raro", y que "a nivel interno" lo consideran "de transición". "El reto no es crecer en días, sino estabilizar la marca y no andar con tantos altibajos presupuestarios", apostilla el responsable, que espera "que el Ayuntamiento y Turismo apoyen el festival", para conseguir "un programa potente del que poder estar orgullosos".