Con siete minutos de aplausos y ovaciones respondió el público compostelano al estreno de A amnesia de Clío, la primera ópera gallega de gran formato del siglo, que cuenta con la participación del Orfeón Terra Nosa y la Real Filharmonía de Galicia. Esta noche a las 20.30 horas A amnesia de Clío llegará a A Coruña, y todo parece indicar que los aplausos volverán a sonar en el Teatro Colón.

La directora escénica de la obra, Marta Pazos, describe este estreno „al que asistieron cerca de mil personas„- como "apoteósico", y afirma que los coruñeses "tampoco pueden perderse el espectáculo de hoy. "Los espectadores se van a encontrar una ópera contemporánea que habla del arte, de la política y del cambio de rol de Clío, la musa mitológica, que supone su recontextualización en la historia contemporánea", declara.

La ópera, en la que participan 70 artistas, es un grito reivindicativo a la figura de la mujer en la historia y el arte: en la primera, ignorada, y en la segunda, siempre musa en lugar de artista. "Visibiliza y responde a ese momento social y político que estamos viviendo, el post 8 de mayo. Pregunta, ¿dónde están las mujeres en esta sociedad convulsa? Es una obra muy necesaria, porque cuenta una historia que hasta ahora siempre fue escrita y contada por hombres desde otra perspectiva", explica la directora.

En una trama trepidante en la que el arte y la política conforman las dos realidades protagonistas, la musa de la historia y de la poesía que representa a todas las mujeres se pasea entre ambos con un libro bajo el brazo, enfrentándose a importantes mandatarios políticos de nuestro tiempo, como George W. Bush.

"Clío porta un libro de historia que ella no escribió. Es un libro que está escrito por un hombre. En nuestra ucronía, esta musa es una alta mandataria que planea la recontextualización de la figura femenina a través de la historia del arte. Es una trama un poco shakespeariana", afirma Pazos, que pone como ejemplo de recontextualización el sonado caso Lewinsky de los años 90: "El título de A amnesia de Clío habla de esa parte borrosa de la historia. Hay sucesos, como por ejemplo el caso Lewinsky, que hace 20 años se trataban de una forma, y hoy en día se tratarían de otra. La historia evoluciona, y actualmente Mónica Lewinsky sería vista como una víctima, no como una verduga", añade Pazos.

El texto de Fernando Epelde, la música onírica de Fernando Buide y una trama que planea sobre la realidad y la ficción convergen en una escenografía que cuenta con el sello personal de la productora, Voladora, de la que forma parte Marta Pazos. "Es una puesta en escena en varias direcciones, que dialoga con la música, el texto, el movimiento, los bailarines... La música dio lugar a que la escenografía tenga un aspecto cinematográfico, y la historia de Epelde habla constantemente de la pintura, por lo que en el escenario hay dos grandes cuadros que hablan y conforman un díptico: el cuadro del arte y el cuadro de la política. La gran musa transita entre uno y otro, reivindicando un espacio que históricamente no le corresponde", declara.

Marta Pazos es, además, una de las pocas mujeres en España que ocupa el cargo de directora escénica en una ópera. "Es una experiencia muy especial, porque, además, hablamos de una ópera de gran formato, con un equipo de aquí y en tu lengua. Para mí es un orgullo y una satisfacción muy grande, y todo está hecho con mucho cariño y cuidando hasta el más mínimo detalle", concluye la directora escénica.