La reconocida directora y documentalista Mabel Lozano presenta desde este martes, día 4, y hasta el 20 de febrero la exposición Chicas Nuevas 24 Horas en el Centro Ágora, una muestra basada en su documental homónimo que denuncia la trata de mujeres y niñas víctimas de explotación sexual. El miércoles también se estrenará su película El Proxeneta, a las 19.00 horas en el Teatro Colón.

¿Cómo se presenta Chicas Nuevas 24 Horas

Esta exposición muestra el viaje de todas esas mujeres que son captadas para ser víctimas de explotación sexual, desde sus orígenes en países como Colombia, Perú o Paraguay, hasta sus destinos -España es uno de los principales-, donde las encierran en los clubes y las convierten en un producto consumible por demandantes cada vez más jóvenes. Muestra la realidad de ese sistema esclavista, sin pornografía del sufrimiento.

Una exposición dirigida especialmente a los adolescentes.

Sí. Queremos llegar a ellos directamente y a través de lo que conocen como nativos digitales, con material audiovisual y una aplicación móvil de un videojuego multiaventura. La exposición termina con una zona interactiva llamada Actúa, en la que cada uno puede sugerir qué haría para terminar con esta esclavitud.

¿Cuál es el detonante de que cada vez hombres más jóvenes demanden prostitución?

La pornografía, el músculo del sexo de pago, la prostitución 2.0. Los chavales la consumen desde que tienen un móvil, y piensan que la sexualidad es eso. Los preparan para que cuando tengan autonomía consuman ese sexo de pago. Yo creo en las relaciones sexuales libres, pero la pornografía es cada vez más dura, más misógina, y reproduce la violencia de género. Repercute en la calle en casos como el de La Manada, y es importante que estos temas se traten en el propio entorno familiar, además de en el escolar.

En El Proxeneta

Exactamente. Basta ya de sacar el tanga y el tacón y de revictimizar a las mujeres. Basta ya de cuestionarlas y de hacerlas culpables. El foco de la prostitución y la trata tiene que estar sobre los hombres que las demandan, sobre los proxenetas y los parásitos de la prostitución que se lucran con ello.

¿Qué ocurre con el llamado proxenetismo consentido?

No está tipificado en España. Nadie puede lucrarse de la prostitución ajena, y todas las caras del proxenetismo deben ser condenadas. Es necesaria una reforma legislativa inmediata, y en eso todos estamos de acuerdo, porque terminaría con la mafia y la esclavitud.

¿Y con el discurso de que cada uno es libre de utilizar su cuerpo como quiera?

Una minoría lo hace, pero la mayoría hace lo que puede con su cuerpo. Pretty Woman es una fantasía, y la mayoría de mujeres que ejercen en España son migrantes a cuenta de un tercero que no son libres para elegir.