La gala 2017 de los Premios Goya ha confirmado al coruñés Alberto Vázquez como uno de los grandes triunfadores en la gran noche del cine español, al hacerse con los dos premios Goya a los que estaba nominadoAlberto Vázquezdos premios Goya: mejor director de largometraje de animación por Psiconautas, los niños olvidados Psiconautas, los niños olvidados-codirigida con el vasco Pedro Rivero-, y mejor director de cortometraje de animación por Decorado. Ayer, todavía recuperándose de una larga velada de celebración, se mostraba "feliz" con su dobletedoblete, sobre todo por el hecho de que los académicos se hayan fijado en filmes que "se salen del clásico cine de animación comercial". "Es muy estimulante para tu trabajo, especialmente cuando no haces cine de animación comercial sino para adultos, con espíritu artístico", subraya.

Al otro lado del teléfono, Alberto Vázquez reconocía en la tarde de ayer a LA OPINIÓN que vivió la gala del sábado "con muchos nervios", aunque pronto tuvo que subir al escenario, ya que los dos galardones a los que optaba se entregaron en el sexto y el séptimo lugar. "Una vez que te dan los premios te olvidas ya de la gala por completo, tienes que pasar a un photocall, cumplir una serie de compromisos, estás en una nube. No era mi primera vez en los Goya, pero reconozco que al principio estaba muy nervioso. Antes de empezar la gala le eché un vistazo a mi teléfono móvil, y cuando terminó lo volví a mirar y tenía más de un centenar de whatsApps. Fue una auténtica locura", reconoce.

Aunque tanto Psiconautas, los niños olvidados -que acumula numerosos reconocimientos internacionales, como el de mejor película de animación en el festival de Stuttgart (Alemania) y el Golden Kuker-Sofia (Bulgaría), además de estar nominada a los Premios del Cine Europeo-, como Decorado -candidata a los Premios del Cine Europeo-, partían como favoritas en la mayoría de las quinielas, el director coruñés no las tenía todas consigo. "Las posibilidades de hacerse con los dos premios estaban ahí, pero nunca puedes saber qué es lo que va a pasar, porque votan los académicos, que es un colectivo muy heterogéneo, con gente que no está vinculada a la animación y es difícil saber qué criterios se siguen. Además, no solo depende de la calidad del producto sino de la labor de visibilización y de cómo los productores hayan dado a conocer el filme", apunta Alberto Vázquez, especialmente agradecido por el hecho de que los Goya hayan puesto sus ojos en dos producciones que "se salen del clásico cine de animación comercial". "Psiconautas Psiconautasno entra dentro de los cánones de la industria para la animación; es animación en 2D, hecha para adultos, con espíritu artístico; somos una rara avis en el sector", señala el cineasta coruñés, partidario de que la Academia de Cine incluya a "más actores y directores que hacen cine menos comercial" en las nominaciones a los Goya.

Psiconautas, los niños olvidados y Decorado son producciones realizadas, además, "en A Coruña, en el polígono de Pocomaco, y con gente de aquí", subraya AlbertoVázquezPsiconautas, los niños olvidadosDecorado Decoradoproducciones realizadas A CoruñaPocomacoAlbertoVázquez, quien lamenta, no obstante, que el sector de la animación tenga muy poco peso tanto en Galicia como en el conjunto de España - "en países de nuestro entorno, como Francia o Suecia, se produce muchísimo más que aquí", subraya-, y pone como ejemplo las nominaciones de los Goya a mejor largometraje de animación, categoría a la que sólo optaban tres películas porque no se hicieron más. "La animación es cara de producir. Son trabajos con tiempos más largos; Psiconautas, de hecho, nos llevó tres años, y Decorado Decoradouno, lo que implica tener contratado a todo un equipo durante muchos meses. Además, las ayudas son pocas y de escasa cuantía", remarca.

Tras la resaca de los Goya, "la vida sigue", y Alberto Vázquez y su equipo están inmersos en nuevos proyectos. A la espera de que el próximo día 24 Psiconautas, los niños olvidados llegue a los cines, el director coruñés trabaja ya en la primera fase de un nuevo largometraje, La guerra del unicornio, "una historia bélica entre osos y unicornios que viven en un bosque mágico". Algo así como "una mezcla entre Bambi y Apocalipsis Now que parodia en cierto modo el cine de guerra". "El 3 de marzo viajaremos a Burdeos para participar en el Cartoon Movie, un importante festival europeo dedicado a la animación que antes se celebraba en Lyon y en el que esperamos conseguir financiación para sacar adelante el proyecto", explica Vázquez.

El director coruñés reconoce que en un sector como el suyo "es difícil saber qué te deparará el futuro", aunque insiste en que, por el momento, piensa seguir trabajando en A Coruña. "Ahora mismo vivo aquí y aquí tenemos nuestro centro de producción. Hacemos cine desde la periferia, con las dificultades que eso conlleva, pero también con sus ventajas. De hecho, los compañeros que vinieron desde Barcelona a trabajar con nosotros estaban encantados en A Coruña, les fascinó la ciudad y su calidad de vida. No sé qué haré más adelante, pero de momento, me quedo aquí", destaca.