Los zumos son una bebida cada vez utilizada por más gente como parte de su dieta. Bien sea en el desayuno, a media mañana o como parte de la merienda, tanto mayores como pequeños pueden tomar frecuentemente vasos de su bebida afrutada preferida. Sin embargo, los nutricionistas llevan tiempo observando las diferencias nutricionales entre estas y la ingesta de fruta real.

Lo cierto es que la fruta cuenta con numerosas propiedades que son realmente interesantes en la dieta de toda persona. Desde las nutritivas vitaminas hasta una importante cantidad de minerales o fibra, pasando por agentes antioxidantes, además de una importante cantidad de agua que favorece la hidratación.

El zumo natural es tan saludable como la fruta fresca, pero hay que tener en cuenta que se aprovecha más la ingesta de esta última, en el sentido de que al comerla sola se consume entera, mientras que en zumo se necesitan varias piezas, aprovechadas parcialmente, para consumir una dosis (lo que lleva a desperdiciar parte de las vitaminas y minerales).

Además, al requerir ser masticada al consumirla, la fruta sacia más, y su digestión se realiza de una forma más paulatina que al beber el líquido, por lo que la glucosa no llega tan rápidamente a la sangre.

También cabe resaltar que los zumos que no son naturales y que llegan envasados tienen un problema añadido y es la presencia de otros ingredientes como importantes cantidades de azúcar en su composición.

Bien es conocido que todos los organismos de salud y nutricionales recomiendan el consumo de varias piezas de fruta al día. Nos equivocaríamos por tanto si considerásemos que el zumo es equivalente.

Consejos para aprovechar la fruta

Una solución parcial puede ser triturar la pieza entera de fruta en una batidora o licuadora en lugar de exprimir el jugo, lo que contribuirá al mejor aprovechamiento de la misma por parte del organismo humano.

También cabe apuntar que el consumo de smoothies (también naturales para evitar que se les añadan grandes cantidades de azúcar) es adecuado, toda vez que añadir hielo picado limita la cantidad de fruta del zumo y provoca una absorción más lenta por parte del organismo al verse obligado este a llevarlo a su temperatura para que se realice la digestión.

Cuándo es mejor tomarlo

Entre las frutas, ni siquiera todas son equivalentes. Algunas son más aprovechables en zumo, como las que tienen mayores efectos diuréticos (piña, pomelo, naranja, pera, melón, sandía...) ya que ayudan a eliminar líquidos.

Además, se debe tener en cuenta cuál es el momento adecuado para su consumo, observando que a lo largo del día, lo ideal es hacerlo a media mañana o media tarde, o bien directamente en el desayuno.